Después
del tangáso de las elecciones…
después
de coger …
la sartén por el mango,
tomando
el poder …
desbancando ladrones,
¿por
qué ganadores?
me fuí preguntando.
Después
de sufrir el recuento cansino…
sentir
… fue bonito sentir,
que
este pueblo, por fin
alzaría la cabeza.
Después
… unos años después,
otra
vez pude ver,
de que mandan los mismos…
Saber
… yo quisiera saber,
si se irá alguna vez…
esa
eterna alcaldesa.
Un
sillón … un culo en un sillón,
una
mochila, un pendiente, un suspiro,
… un fracaso más,
otro
“quiero y no puedo” …
otra vez la farsa, de
la democracia,
la que hemos tenío,
la que no ha existío,
… y no existirá.
El
disidente quemáo,
quedó
achantáo, al ver que los “suyos”,
iban
a salvar al mundo …
mientras él se iba a pescar.
… Y
la piedra durmió en mi mano …
y no rompió los cristales…
de
injusticia, de desencanto,
… de destrozar libertades.
… y
volvieron las viejas sombras …
que siempre vienen del norte…
del
“podemos y no queremos” …
en este Sur que se esconde.
“Pon
un Rey carnavalero,
que éstas son gentes de fiestas,
pon
un tuerto pa los ciegos,
que nadie vé en esa tierra,
pon
a un mocito feliz,
pa que grite “si se puede”,
ya se enterará el pelele,
… quien es el que manda aquí”.
“Si
de todo va a pedir,
échale al perro banquero...
es
tan solo un Don sin din,
todo es nada, sin dinero”.
Mientras
sea uno de ellos,
el que sostenga el “Bastón”,
no
tendremos pancartas ni rebelión,
… solo sabe del lobo el cordero muerto.
Por
más que arda el Dios Momo,
siempre
estaremos nosotros…
…
los que siempre Podemos.
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21/10/2017
M. Rubio
